Ètica/Moral

El año 1973 Pedro Arrupe, general de la Compañía de Jesús, pronunció un discurso histórico ante los Antiguos alumnos de los colegios de jesuitas de Europa. A la luz del Concilio Vaticano II y de los signos de los tiempos, se actualizaba la espiritualidad ignaciana. El discurso sugerente e inspirador también para nuestros días, nos invita a vivir el cristianismo en clave de opción de vida por la justicia y a favor de los más empobrecidos.

Ante la proliferación de vegetales modificados genéticamente y después de comentar los diversos genes que se han alterado, Cuadros plantea los pros y contras del cultivo de estas especies. Pros como mayor producción y la posibilidad de acabar con el hambre en el mundo y contras como falta de transparencia y de seguridad para la salud, falta de justificación ética, efectos sobre la biodiversidad, y, quién sabe, la aparición de bacterias más resistentes. Y podríamos acabar dependiendo todos los comensales de unas pocas y potentísimas transnacionales, como Monsanto. 

Siguiendo el proceso de fabricación de una pelota en Pakistán nos podemos dar cuenta de los costes sociales, sanitarios, ambientales, laborales, educativos,... que tiene esta producción. Explotación infantil y niños sin acceso al sistema educativo, sufrimiento de los animales, contaminación de aguas y terrenos y enfermedades que se derivan, transporte a larga distancia, ... Así, cuando compramos un balón, pagamos tan sólo una parte de su verdadero coste. La otra parte la pagan los que lo fabrican y todos los que sufren las consecuencias de esta fabricación.

La banca ética permite invertir nuestros ahorros en productos respetuosos con los derechos humanos y hacer préstamos a personas a las que un banco tradicional no prestaría dinero. Se mueve, habitualmente, en el ámbito del cooperativismo. Debe ser rentable financieramente y socialmente. Uno de losprimeros bancos fue el Grameen Bank, Bangladesh, que se caracteriza por ofrecer microcréditos a personas sin recursos. En Cataluña, un ejemplo de banca ética es Oikocrèdit Internacional.
 

El Equipo de CiJ, ante la tragedia del 11 de marzo, reflexiona sobre la complicidad del género humano con el mal. Como se vio en Auschwitz y se ve en muchas regiones del mundo, y como se sigue viendo en el holocausto provocado por el hambre. Hay dos terrorismos, el de la insolidaridad estructurada y el de la desesperación y el fanatismo. Es necesaria una paz fruto de la justicia. El documento critica duramente un gobierno español que mintió acusando a ETA de la matanza cuando todo apuntaba al yihadismo.