cultura y justicia"
Plenitud humana. Reflexiones sobre la bondad
A pesar de su maldad, el ser humano está siempre bajo la mirada benevolente y la oferta del Amor de Dios que, cuando es aceptado en la fe, nos libera de esa necesidad de afecto o de aceptación y justificación que nos constituye. La liberación (justificación) por la fe es una capacitación para amar a los demás y una liberación de la obligación moral: porque la práctica del bien deja de ser entonces una imposición exterior, para convertirse en una necesidad interior.